Lesiones tendinosas.
Los Tendones, las “cuerdas” que logran que el movimiento que se genera en el músculo llegue a mover nuestros huesos, pueden y sufren múltiples patologías, estos son de muchos tamaños y están distribuidos en todo el cuerpo. Tal vez la mano es la zona que mayor cantidad de tendones tiene y donde mayor nivel funcional estos presentan, esto hace que sus lesiones sean muy discapacitantes en la mayoría de los casos, en la mano, una de las lesiones mas frecuentes es el corte tendinoso y para comprender la dificultad que su lesión representa, debemos comprender un poco su anatomía.
A grandes rasgos existen tendones flexores, encargados de doblar los dedos y la muñeca y tendones extensores que se encargan de la función contraria; las lesiones de los tendones flexores pueden considerarse más discapacitantes pues en flexión es cuando la mano realiza sus principales funciones, dichas lesiones las trataremos en un próximo momento en que haremos una exposición del tema para todos ustedes.
En cuanto a las lesiones de los tendones extensores, en general podemos decir que toda ruptura del tendón extensor es una lesión que abarca importancia en la función, pues al ser los tendones flexores mas fuertes, cualquier ruptura del extensor va a generar un desbalance hacia la flexión del dedo con la consecuente deformidad que es dependiente del sitio de lesión del extensor, si las rupturas son generadas por un arrancamiento o por un corte afilado del tendón, no tiene mayor importancia en la consecuencia de deformidad que se presentará, pero probablemente si afecte en el tratamiento que debemos realizar, sin embargo, esa decisión deberá tomarla en su momento, el Cirujano de Mano.
Si la lesión extensora se produce a nivel de la falange distal del dedo, la punta del mismo caerá y se generará una lesión llamada “dedo en martillo” esta, en la mayoría de casos, puede ser manejada solamente con una inmovilización que permita la cicatrización del tendón lesionado en su posición, pero si la lesión es ya prolongada en el tiempo, la capacidad de cicatrización disminuye y obliga a una resolución quirúrgica.
Cuando la lesión se produce a nivel de la falange media, se produce una deformidad diferente llamada “dedo en botonera”, esta se da por la configuración anatómica especial del extensor, en la cual una cintilla extensora central al lesionarse produce un desbalance con las cintillas extensoras laterales que se luxan haciendo que se extienda la punta del dedo pero se doble la parte central de éste, es importante entonces entender que el tendón extensor en la zona de la articulación proximal del dedo se divide en 3 cintillas, dos laterales y una medial como se explica en el dibujo.
Cuando la lesión se produce a un nivel más alto de ese punto, simplemente perderemos la capacidad extensora del dedo y será necesaria una resolución quirúrgica, ya sea reparando el tendón o transfiriendo otro tendón que reemplace la función del lesionado.
En resumen, cualquier lesión que afecte un tendón, requiere un tratamiento de especialidad que debe ser instaurado lo antes posible para evitar consecuencias de deformidad importantes que afecten la función de los dedos de la mano.
